Después de dos victorias consecutivas en casa, la Semana Santa se le atraganta al Urbas Fuenlabrada y cae de mala manera en Tenerife y Badalona.

Foto: ACB Media

Tras vencer al Bilbao Basket y al Obradoiro en el Pabellón Fernando Martín, la moral del aficionado del Urbas Fuenlabrada estaba por las nubes y miraba hacia el «tour» que tenían por delante fuera de casa con ganas y muy buenas expectativas.

Los rivales del Fuenla, es cierto, no eran los mejores para intentar sacar alguna victoria de los pabellones a visitar en esta Semana Santa: el Santiago Martín donde esperaba el Lenovo Tenerife recién clasificado para la Final Four de la Champions y el Olímpico de Badalona para enfrentarse a un Joventut de Badalona que está realizando una de las mejores temporadas de los últimos años. Y claro, pasó lo que pasó.

Tenerife y Joventut, dos equipazos luchando por un mismo objetivo en la Liga Endesa, y el Urbas Fuenlabrada que tan solo ha ganado un partido lejos del Fernando Martín durante todo lo que llevamos de competición no parecía la mejor combinación para ver los dos encuentros y terminó siendo una dura realidad.

Tanto en las Islas Canarias como en Badalona se vio el mismo guión de partido, esto eso, una muy buena salida de los del Josep María Raventós, abriendo hueco en el marcador y planteando muy buenos ataques y muy buenas defensas… pero ese buen juego solo duró 10 minutos en ambos choques. Y a partir del segundo cuarto, es el rival el que aprieta, el que reacciona, el que sube el nivel defensivo, el anota con relativa facilidad y el que hace que los fuenlabreños poco a poco vuelvan, lejos de casa, a no competir el triunfo.

Idéntico resumen es el que hay que hacer de los dos partidos disputados el pasado fin de semana. En los dos, primero los de Txus Vidorreta y después los de Carles Durán, le dan la vuelta al marcador en un segundo cuarto desastroso por parte visitante y dejan visto para sentencia el duelo en el descanso.

No es menos cierto que en ambos encuentros la segunda mitad del Fuenla es bastante mejor que ese segundo y desastroso cuarto, pero con unas rentas superiores a los 12 y 15 puntos, ante rivales que están jugando por ser tercero y cuarto y tener el factor cancha a favor en el primer cruce del play off por el título, es darles demasiada ventaja para luego intentar darle la vuelta.

Al final, con algo más de competitividad, en Tenerife se termina cayendo 87-74, 13 puntos de diferencia que pudieron ser muchos más si los canarios no bajan la guardia al final, y en Badalona se cae estrepitosamente por 92-75 en un duelo que se fue perdiendo por más de 20 puntos.

En el apartado de individualidades, nada que destacar más allás del buen momento anotado de Obi Emegano, el mejor del equipo en los dos partidos, el buen hacer de Dusan Ristic, que sigue creciendo en esta recta final, la buena dirección de Ziga Samar al que esta vez no puede acompañar Jovan Novak, lesionado en uno de sus pies y que no jugó ni un segundo en Badalona, y poco más. Como dijo Raventós tras caer en Badalona «cuando entran las rotaciones bajamos claramente el nivel defensivo y ofensivo» y de esta manera, y más lejos de tu gente, es casi imposible competir contra nadie en la ACB.

Tras estas dos duras derrotas fuera de casa, el Urbas Fuenlabrada se mantiene con 10 victoria en 13ª posición, pero con toda la parte baja de la tabla muy comprimida y teniendo que realizar una tercera salida consecutiva, el próximo sábado a las 18.00 horas en La Fonteta frente al Valencia Basket.